La administración de tareas complejas de almacenamiento, tales como live volume, el cifrado, la replicación y la planificación de la capacidad para SAN de varios terabytes en múltiples ubicaciones o incluso en un entorno federado con más de una interfaz, puede ser un reto. Los costos y la complejidad operativos pueden crecer exponencialmente a medida que la capacidad de almacenamiento aumenta.